El nudo Vuelta de Escota es probablemente el enlace más utilizado de todos, y con diferencia a otros empalmes, puede utilizarse para la unir cuerdas de diferente grosor. No es, sin embargo, seguro en un cien por cien, y no debe utilizarse en circunstancias en que esté sometido a un gran esfuerzo.
Su fuerza de rotura de la vuelta de escota disminuye en proporción directa a la diferencia de diámetro de las líneas que se unan. El empalme de escota (empalme común o nudo de bandera) ha sido identificado en antiguas pinturas egipcias, pero su nombre actual no apareció impreso hasta el año 1794.
El nombre proviene de la forma en que se usaba en los veleros para asegurar los cabos, conocidos como escotas, a las velas. Con independencia de este uso tradicional, es el nudo utilizado para unir las esquinas de las banderas a las cuerdas cuando éstas se izan o se arrían, por lo que se le conoce también como nudo de bandera.
Puede utilizarse también para amarrar cualquier cosa que tenga un mango abierto, a través del cual se pasa el cabo y se sujeta con el mismo cabo. Es rápido de hacer y fácil de deshacer, siendo uno de los nudos básicos que todos los marineros deben conocer.
Elaboración de la Vuelta de Escota
Con el seno de uno de los cabos se forma un bucle a modo de gaza, si es que no la tiene. Se pasa el chicote del otro cabo por dentro de la gaza, se le da vuelta y se pasa el chicote por debajo del firme para que quede mordido por él.
El “vuelta de escota” también puede hacerse dando dos vueltas sobre el bucle en lugar de una, antes de morder el chicote; entonces se llamará “doble vuelta de escota”. De esta forma aumenta la seguridad del nudo, siendo recomendable cuando deba permanecer trabajando durante mucho tiempo.